Cardioncología

Nuestro equipo atiende a personas con cáncer que tengan antecedentes de enfermedades cardiovasculares o factores de riesgo de padecerlas.

Asimismo, algunos tratamientos oncológicos, especialmente aquellos para el cáncer de seno son cardiotóxicos, es decir, pueden empeorar los problemas del corazón existentes o provocar otros en personas que no habían recibido el diagnóstico de una enfermedad del corazón.

Nuestro equipo trabaja en estrecha colaboración con los oncólogos de Baptist Health para identificar cuándo se necesita una remisión a nuestros especialistas para recibir atención cardíaca preventiva o tratamiento.

Si su oncólogo considera que el tratamiento oncológico puede elevar su riesgo de presentar efectos secundarios en su aparato circulatorio, lo remitirá al programa de cardioncología para hacerle pruebas de imagenología del corazón. Esto nos permitirá ver el estado actual de su corazón y entender mejor sus factores de riesgo de padecer una enfermedad cardiovascular.

Si presenta un riesgo elevado de desarrollar enfermedades cardiovasculares por otras afecciones, como la hipertensión y la diabetes, nuestro equipo se asegurará de que tratar y controlar estas enfermedades mientras recibe la atención oncológica.

Si los resultados de las pruebas indican que corre riesgo de presentar problemas del corazón, trabajaremos con usted durante todo su tratamiento. Nuestro equipo hará pruebas periódicas de imagenología del corazón para detectar cualquier efecto secundario y ajustar los medicamentos según sea necesario.

Nuestro equipo verifica la salud del corazón mediante ecocardiogramas avanzados. Estas pruebas de imagenología sirven para medir cómo se contrae el músculo cardíaco. Además, se usan ecocardiogramas para generar modelos tridimensionales del corazón para ver qué tan bien el corazón bombea la sangre.

El tratamiento depende de su diagnóstico y estado de salud general. En algunos casos, es posible que debamos ajustar o añadir medicamentos para el corazón que eviten que la afección se agrave. En situaciones más graves, es posible que hagamos pruebas avanzadas para evaluar las arterias cardíacas y cerciorarnos de que la sangre circule libremente.

Si determinamos que ha desarrollado problemas del corazón a raíz del tratamiento del cáncer, trabajamos en estrecha colaboración con el oncólogo para ajustar su plan de tratamiento. Es posible que eso implique cambiar o interrumpir el tratamiento de quimioterapia hasta que podamos tratar su afección cardíaca.